Bienestar subjetivo - BIARE Piloto

El enfoque de Medición del Progreso de las Sociedades surge de un consenso internacional en el que ha influido de manera sobresaliente el reporte de la Comisión Sobre la Medición del Desempeño Económico y el Progreso Social (Comisión Stiglitz-Sen-Fitoussi), en donde se señalan ciertas limitaciones de las estadísticas convencionales para reflejar el progreso y el bienestar social. En los últimos años la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), de la que México es miembro, se hizo eco de esta iniciativa y formuló recomendaciones para captar estadísticamente un aspecto que mira más allá de lo convencional: a ese aspecto o dimensión, que en particular aquí nos ocupa, —constitutivo de la Medición del Progreso de las Sociedades— se le denomina Bienestar Subjetivo.

Bienestar objetivo y subjetivo son dos aspectos que se complementan. El bienestar objetivo centra su atención en satisfactores materiales de la existencia social, cuya suficiencia es determinada por un experto o grupo de expertos para permitir el ejercicio de capacidades de individuos y poblaciones. Bienestar subjetivo hace referencia a experiencias de vida en primera persona. Si el propósito del desarrollo es hacer que las personas vivan mejor, es entonces imprescindible considerar cómo ellas están experimentando su vida. Sin el testimonio vivencial de los individuos, la identificación de su bienestar quedaría incompleta.

El INEGI se ha sumado a este esfuerzo de medición en el cual se toma en cuenta la dimensión subjetiva del bienestar a partir del diseño de los denominados módulos BIARE (Bienestar Autorreportado) que acompañan a encuestas en hogares del Instituto, ello para tener una comprensión más integral de las personas y de la sociedad en el México del siglo XXI, así como del impacto de la política pública en la manera como experimentan sus vidas.

En la medida que la OCDE ha promovido esta iniciativa, los indicadores de bienestar subjetivo forman parte de la plataforma de indicadores para la medición del progreso adoptada y promovida por la propia OCDE¹. Por su parte, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) emitió en 2011 la Resolución A/RES/65/309, denominada Felicidad, hacia un enfoque holístico del desarrollo, con la que la asamblea “invitó a los estados miembros a seguir pasos de política pública que capten mejor la importancia de la búsqueda de la felicidad y el bienestar en el desarrollo”; en tanto que, a partir de 2010, el Reporte de Desarrollo Humano del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) ha comenzado a incorporar cifras de satisfacción con la vida para un amplio número de países².

La OCDE es un referente clave porque si bien hasta ahora la información disponible a nivel internacional sobre el tema se desprende del valioso esfuerzo de consultorías y empresas privadas de estadística, esta información no se recopilaba bajo los estándares de una estadística oficial y para ello OCDE emitió sus lineamientos³ con el propósito de ayudar a las oficinas nacionales de estadística a generar resultados de calidad y comparables, sobre todo considerando que a la tendencia oficial de incorporar la temática del Bienestar Subjetivo ya se venían sumando países como Australia, Bután, Canadá, China, Filipinas, Francia, Italia y Reino Unido⁴.

Bajo el lineamiento OCDE de medición del Bienestar Subjetivo, el INEGI fue de las primeras oficinas nacionales de estadísticas del mundo en implementarlo. El primer ejercicio con un módulo BIARE acompañó el levantamiento de la Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares (ENGASTO) durante el primer trimestre de 2012 (Módulo BIARE Piloto). En 2013 se comenzó a aplicar un módulo BIARE acompañando a la Encuesta Nacional Sobre la Confianza del Consumidor (ENCO) en el mes de julio y, a partir de ahí, en el primer mes de cada trimestre para darle un seguimiento continuo a los indicadores básicos de Bienestar Subjetivo (Módulo BIARE Básico). Por su parte, un complemento BIARE se añadió al Módulo de Condiciones Socioeconómicas o MCS en el levantamiento que tuvo lugar de agosto a noviembre de 2014 (Módulo BIARE Ampliado). Este ejercicio además de darle un mayor contexto al conjunto de indicadores básicos permite, por primera vez, que la información sea representativa por Entidad Federativa (la muestra BIARE-ENGASTO fue representativa a nivel nacional, mientras que BIARE-ENCO es representativa sólo del conjunto urbano del país, aunque de manera continua, que es su ventaja sobre las de cobertura nacional).

Por último, cabe mencionar que el Instituto ha promovido el conocimiento sobre el tema por medio de diversos seminarios internacionales, en los que han participado científicos de talla internacional, así como estadísticos oficiales, funcionarios de diversas instancias de gobierno y organismos no gubernamentales, entre otros⁵. Además, el INEGI en conjunto con la OCDE llevaron a cabo, en 2015 y en la ciudad de Guadalajara, Jalisco, el Quinto Foro Mundial sobre Estadísticas, Conocimiento y Políticas, donde se dieron cita personajes de talla mundial y expertos provenientes de más de 80 países, para discutir cómo avanzar en la medición del progreso de las sociedades y hacer que, esas mediciones, incidan en políticas que impacten positivamente la calidad de vida del mayor número posible de personas en el mundo. Claramente, el tema de Bienestar Subjetivo jugó un papel central —junto con otros temas fundamentales— en esas discusiones.

Como parte de los compromisos que se desprendieron de la Conferencia Latinoamericana para la Medición del Bienestar y la Promoción del Progreso de las Sociedades que tuviera lugar en la Ciudad de México del 11 al 13 de mayo de 2011, el INEGI decidió emprender una primera exploración de medición del Bienestar Subjetivo, sus dominios, sus condicionantes y su contexto mediante el diseño de un módulo de preguntas que acompañaría el levantamiento de la Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares.

A dicho módulo experimental se le denominó: Bienestar Autorreportado 2012 o más sucintamente BIARE Piloto, y se diseñó como un cuestionario de autollenado (salvo que se detectara que la persona seleccionada tuviera problemas de lectoescritura, de debilidad visual o que expresamente solicitara que el módulo se contestara bajo el formato de entrevista).

Durante el primer trimestre de 2012, el INEGI aplicó en una muestra de hogares del país, el primer módulo tipo BIARE (Piloto) como complemento de encuestas en hogares para conocer la satisfacción con la vida, la felicidad y el balance afectivo de la población adulta en México.

El Objetivo de todo módulo BIARE es primeramente obtener mediciones y reportes de cómo las personas experimentan su propia calidad de vida, en contraste con los métodos tradicionales que se concentran en el acceso o disponibilidad de satisfactores asociados a condiciones de vida. Bajo la modalidad ENGASTO, permite vincular las respuestas que al respecto emita la población con sus características económico y sociales, así como la relación que ello pueda guardar con el entorno en el que las personas interactúan, construyen su mundo y su sociabilidad.

La medición del bienestar subjetivo surge de un consenso internacional creciente, que tomó especial reconocimiento e impulso a partir del informe originalmente comisionado por el gobierno de Francia a un amplio grupo de expertos del más alto nivel a escala internacional, encabezado por los profesores Joseph Stiglitz (Premio Nobel de Economía 2001), y Amartya Sen (Premio Nobel de Economía 1998), así como por Jean Paul Fitoussi —presidente del observatorio francés de coyuntura económica—, informe dado a conocer en el año 2009. En el informe de la también llamada Comisión Stiglitz se concluye que si bien el Producto Interno Bruto (PIB) es el mejor agregado macroeconómico para medir el nivel de actividad de los países, resulta a todas luces insuficiente, o incluso inadecuado, como indicador de bienestar bajo la modalidad de PIB per cápita o valor agregado por habitante. A partir de ese diagnóstico se promueve un concepto más allá del PIB al que se le denomina “Medición del Progreso de las Sociedades” que comprende tres grandes dimensiones:

1. Progreso Material
2. Sostenibilidad
3. Calidad de Vida
• Capacidades
• Bienestar subjetivo

Los agregados macroeconómicos siguen formando parte los indicadores de Progreso Material, si bien ajustados cuando sea posible para que, más allá de medir la actividad económica, permitan identificar los recursos que efectivamente disponen las personas y los hogares al atender sus necesidades; también no se limitan a medidas con base en promedios, pues hay que considerar cómo esa disponibilidad de recursos se distribuye de manera más o menos generalizada o equitativa entre la población.

La noción de Sostenibilidad aspira a cuantificar qué se está haciendo o dejando de hacer para no comprometer los derechos de las generaciones futuras en materia ambiental a través de un conjunto de indicadores que la OCDE ha comenzado a promover en el marco del concepto de economía verde. Algunos de los indicadores contemplados apuntan a medir la merma/reposición de stocks recursos naturales, sean directamente económicos o bióticos —aspecto que en los cálculos tradicionales queda fuera de la medición del PIB—. La Sostenibilidad nos habla entonces del manejo óptimo desde la perspectiva intergeneracional del capital natural del que se dispone, pero no sólo de ese tipo de capital, sino también del capital social, del capital humano y, por supuesto, del capital físico. Esta es pues una dimensión nueva de información que se espera ir fortaleciendo entre los países miembros a lo largo de la presente década.

En cuanto a la dimensión concerniente a la Calidad de Vida se desdobla en dos vertientes: la de Capacidades y la de Bienestar Subjetivo. La de Capacidades es una que merecidamente ha recibido atención en países como en México, ya que tiene que ver con la medición de las condiciones objetivas bajo las que viven las personas para determinar si están en un contexto propicio o no para desarrollar su potencial (en términos de su libertad para ejercer funcionamientos acordes al tipo de vida que prefieran), tanto para sí mismos como para la sociedad. Los resultados de las metodologías de medición del Índice de Desarrollo Humano del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo así como las desarrolladas para el cálculo de la pobreza que ha venido realizando en México CONEVAL con base en información del INEGI, apuntan en esa dirección y proporcionan un componente fundamental al respecto. Otro tanto es aportado por los Indicadores de Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) en esta vertiente de medición.

Por su parte, la vertiente de Bienestar Subjetivo, atiende a un enfoque psicológico del bienestar que cobra cada vez más relevancia y que por ello ha comenzado a ser incorporada en el marco de atención de las algunas oficinas nacionales de estadística en el mundo, entre las que se cuenta el INEGI en México, que explora el abordaje del tema con los denominados módulos BIARE (Bienestar Autorreportado). Estos módulos pueden adoptar más de una modalidad, siendo el primer paso una encuesta amplia mas no continua —es decir no levantada todos los años— pero que no excluye el ser complementada más adelante con una modalidad de coyuntura por la vía de un cuestionario ligero aplicado a una muestra más pequeña y fácil de cubrir en el corto plazo, de modo que este tema sea abordado tanto en profundidad cada cierto número de años, como en oportunidad de manera continua. También podrá sumarse aquí la información que generen otras encuestas no necesariamente levantadas por el INEGI, pero que aportan al debate y conocimiento sobre el tema.

Con BIARE Piloto (o BIARE asociado a la encuesta ENGASTO 2012) se obtuvo información que permite integrar un documento social, hasta ahora inédito desde la perspectiva de la oficina nacional de estadística oficial en México, sobre cómo experimentan las personas sus vidas, dados sus antecedentes, su entorno y su proyección a futuro.

El diseño de BIARE Piloto siguió una primera versión de recomendaciones por parte de la OCDE para la Medición del Bienestar Subjetivo, en cuanto a incorporar preguntas relativas a satisfacción con la vida, dominios de satisfacción y balance afectivo, además de tomar en cuenta dichas recomendaciones en la forma de enunciarlas, las escalas de respuesta y la ubicación dentro de la secuencia de preguntas en el módulo.

También se tomaron en cuenta los contenidos de la Encuesta Social Europea pero, sobre todo, fueron incorporados elementos relativos a la inserción de los individuos en su entorno social que permiten aportar nueva información estadística en México en asuntos tales como derechos humanos, cohesión y participación ciudadana, familia, género y vulnerabilidad, salud física y mental, así como información estadística obtenida, por primera vez en una escala mayor a los estudios de caso, para aquéllos enfocados a áreas de interés tales como la sociología y la antropología o incluso la psicología e historia social. Ello es así porque BIARE proporciona, en cierto sentido, un autorretrato de la población adulta mexicana en la segunda década del siglo XXI.

El módulo fue dirigido a personas de entre 18 a 70 años seleccionadas dentro de los miembros de la vivienda por un método aleatorio (la persona cuyo cumpleaños fuera el próximo al momento de aceptación de la encuesta en la vivienda).

Si bien la modalidad de autollenado se presta a una tasa de no respuesta mayor (17% de entrevistas menos que las conseguidas por la Encuesta Nacional de Gastos) se recuperaron 10 mil 654 cuestionarios BIARE Piloto con 66 reactivos cada uno. Posteriormente los ponderadores de BIARE Piloto fueron ajustados para compensar sesgos por la no respuesta.

La recolección de información se realizó a lo largo del primer trimestre (enero-marzo) de 2012.

Es importante señalar que el diseño de la muestra BIARE Piloto es uno del que sólo se pueden hacer inferencias de la población a nivel nacional sin desagregación territorial. Dicho de otra forma, La muestra es representativa de la población de entre 18 y 70 años de la nación en su conjunto, no de dicha población en dominios territoriales específicos como estados y municipios.

Desde el punto de vista estructural-funcional, BIARE Piloto contiene cuatro tipos o familias de preguntas: a) aquéllas cuya función es caracterizar, b) las centradas en eventos o acontecimientos, c) las que exploran el involucramiento de la persona con su entorno o la pasividad con respecto a él, y d) las que exploran dominios de satisfacción con la vida y necesidades identificadas.

Estas cuatro familias de preguntas (en adición a las dedicadas propiamente a medir el bienestar subjetivo que se describen más adelante) cubren 15 temáticas distintas:

1. Aspectos sociodemográficos
2. Situación económica en general
3. Progreso intergeneracional
4. Discriminación
5. Salud
6. Presencia de adicciones en el hogar
7. Entorno de violencia o de ausencia de ella
8. Logros y reconocimiento
9. Bienes relacionales ( frecuencia de contactos con familia y amistades/ participación en redes sociales)
10. Biografía (fallecimiento reciente de seres queridos/ felicidad o adversidad en niñez y adolescencia)
11. Libertad y autonomía personal
12. Actividad física
13. Utilización del tiempo libre
14. Apoyo o solidaridad hacia terceros
15. Compromiso con el medio ambiente y empatía con la vida no humana

Por su parte desde un punto de vista analítico, las variables dedicadas propiamente a medir el bienestar subjetivo en BIARE Piloto son 1) La satisfacción con la vida, 2) Dominios de satisfacción, 3) El balance afectivo y 4) Qué tan felices se consideran a sí mismas las personas. Estas variables son susceptibles de ser correlacionadas con el resto de las variables contenidas en el cuestionario. El alcance, naturaleza y posibles implicaciones causales de estas correlaciones, es el reto que han de enfrentar analistas, investigadores y usuarios que deseen profundizar en la exploración a partir de modelos estadísticos o econométricos.

Cabe precisar que por satisfacción con la vida se entiende una evaluación que hacen las personas sobre su biografía como un todo y en donde en dicha evaluación predomina la perspectiva cognitiva sobre la emocional: la pregunta de satisfacción con la vida apela sobre todo a una reflexión de modo que, a partir de ella, la persona califique dicha satisfacción con valores que pueden ir de 0 hasta 10.

Una vez que se preguntó sobre la satisfacción con la vida en general al inicio el módulo, se pide a los entrevistados que informen sobre su satisfacción respecto de una lista de temas específicos o “dominios”, lo que ayuda a hilar más fino sobre la complejidad de las experiencias de las personas que subyacen a sus evaluaciones globales de bienestar. Los dominios en consideración son los siguientes:

1. Tiempo libre
2. Logros personales
3. Perspectivas a futuro
4. Situación económica
5. Trabajo (en caso de tener uno en el mercado laboral)
6. Vivienda
7. Vecindario o colonia
8. Estado de salud
9. Educación o instrucción que se tiene
10. Estado de salud
11. Vida familiar
12. Vida social
13. Apariencia
14. País en el que vive

El balance afectivo se aborda como la resultante de estados de ánimo positivos y negativos efectivamente experimentados en un período de referencia específico, que es el día anterior al llenado del cuestionario.

Los estados positivos son alegría (positivo exaltado) y tranquilidad (positivo plomizo) mientras que los negativos son enojo (negativo exaltado) y tristeza (negativo plomizo), siendo que para cada uno de los cuales se pidió que se indicara su intensidad con escala de 0 a 10.

Se suman las calificaciones tanto de los estados anímicos positivos y negativos y finalmente se restan. Esto daría un valor máximo de +20 y uno mínimo de -20. Dada la recomendación de OCDE en la versión preliminar de sus Lineamientos para la Medición del Bienestar Subjetivo, el resultado positivo o negativo se re-expresa en una escala que va de +1 a -1 para tener un indicador que refleje un continuo de bienestar emocional desde la peor hasta la mejor situación posible.

La pregunta sobre felicidad es una que se formuló en el tramo final del cuestionario (es el reactivo número 65), una vez que se abordaron una serie de aspectos en la vida de las personas. Comparte con la pregunta de satisfacción a que se refiere a lo general, a la vida en su conjunto y no a un momento específico y por ende transitorio (como el día anterior), pero difiere en que en ella predomina el cómo se siente la persona, es decir, lo emocional, sobre lo cognitivo o reflexivo, aunque este segundo elemento no está del todo ausente. La pregunta de felicidad al final del cuestionario no es una que recoja una respuesta a botepronto, como las preguntas constitutivas del balance afectivo al inicio del mismo.

Esta pregunta también queda sujeta a una escala de 0 a 10.

En este sitio experimental el usuario podrá ver una sección de tabulados obtenidos del BIARE Piloto repartidos en cinco bloques, lo que la dará una primera idea de la información que se puede obtener de este primer levantamiento. Cada archivo que el usuario abra tiene no sólo el cuadro que se muestra en pantalla, sino a su vez en la parte inferior las “pestañas” que le permitirán ir activando cada uno de los contenidos de la secuencia temática que conforman el bloque en cuestión.

Así pues los bloques o grupos de tabulados son:

1. Tabulados Básicos
2. Poblaciones distribuidas por niveles de satisfacción y felicidad
3. Promedios de satisfacción, felicidad y balance afectivo por características de la población
4. Promedios de satisfacción, felicidad y balance afectivo según la presencia o no de ciertos eventos o acontecimientos
5. Promedios de satisfacción en aspectos específicos de la vida y necesidades identificadas

Para los usuarios que deseen profundizar más se pone asimismo a su disposición el acceso a la base de datos del BIARE Piloto junto a la relación de campos, mnemónicos, códigos y variables (file description), de modo que se pueda realizar desde minería de datos hasta correr modelos econométricos y estadísticos en general. El usuario no deberá perder de vista sin embargo, que los datos que aquí se ofrecen provienen de una encuesta probabilística, que cada observación o registro debe ser multiplicado por su respectivo ponderador o factor de expansión y que no se recomienda, asimismo, trabajar con cruces de variables o grupos que den por resultado menos de 90 observaciones o registros antes de expansión (salvo que ese grupo de observaciones tuviese una varianza muy pequeña), ya que ello puede ir más allá de la representatividad de la muestra y de las garantías para obtener las estimaciones robustas e insesgadas que se desprenden de su diseño.